La tecnología permea a estas alturas cada faceta de la sociedad: desde las grandes entidades que gestionan nuestro entorno, en todos los procesos productivos de nuestra sociedad, hasta los elementos más mundanos de nuestra vida diaria: estamos siempre en contacto continuo, directo e indirecto, con la tecnología que hace todo ello posible. Así, no es de extrañar que el progreso de esta tecnología, la innovación que le permite avanzar, adaptarse y renovarse, se genere también en todos los ámbitos posibles: desde los programas de desarrollo llevados a cabo por grandes centros de investigación y universidades, hasta el ingenio de personas «de a pie» pero con interés. entusiasmo e ideas nuevas; todos son igualmente necesarios para asegurar una tecnología en continuo movimiento y crecimiento.
Es particularmente interesante este último caso, el de las personas que hacen de la tecnología más una afición que una profesión (aunque no son conceptos reñidos): lo que se conoce como el fenómeno maker. Gracias a unas herramientas de fabricación, programación y prototipada más accesibles, cada vez más personas pueden desarrollar sus conocimientos en este ámbito de la tecnología. Muchas veces, los proyectos desarrollados por esta comunidad maker está más alineada con los intereses, necesidades y particularidades de la ciudadanía local, sirviendo así como punto de unión entre las personas y esa primera línea de la innovación; algo especialmente importante a la hora de integrar la tecnología, y el interés por la misma, en regiones tradicionalmente desconectadas de este ecosistema.
Es bajo este ideal de tecnología interesante y accesible que se celebró, 23 y 24 de Noviembre, FIMIT, la Feria Ibérica Maker y de Innovación Territorial. En ella, se dieron cita la mayoría de agrupaciones que componen el ecosistema maker de la región, contando así con la presencia de los distintos FabLabs de las provincias de Cáceres y Badajoz; asociaciones que trabajan en la integración de innovación con artesanía tradicional; y entidades de alcance regional y nacional enfocadas en la investigación, la divulgación, o el desarrollo territorial (muy en la línea ya indicada por el propio nombre del evento). Todas ellas contaron con un espacio en el que mostrar su actividad y compartir sus experiencias, tanto en la zona de exposición como a través de las distintas ponencias y talleres programadas a lo largo de ambas jornadas.
Entre las administraciones con representación en el evento estuvo la Diputación de Badajoz, que participó tanto con un espacio de demostración como con ponencias y talleres a cargo tanto de los CITLabs —la Red provincial de fablabs de la Diputación, con centros en varios municipios de la provincia, así como en El Hospital Centro Vivo— como del equipo del centro FIWARE Space. Ambas entidades se aseguraron de mostrar la labor de la administración pacense en el ámbito de la digitalización y la creatividad tecnológica.
La participación de la Diputación Provincial de Badajoz en FIMIT está integrada dentro de la estrategia general de la administración para la transformación digital del territorio, aprovechando al máximo las posibilidades que proporciona una base tecnológica firme a la hora de potenciar la economía y el tejido social de la provincia y de luchar contra problemas como la despoblación de la región.
